Secret Magic Pool Garden

En colaboración con Sotirios Kotoulas y Sotirioscorp

Ubicada en las ruinas de un edificio comercial del siglo XIX, adyacente a un antiguo mercado público, la segunda residencia de la artista Katherine Bernhardt fusiona a la perfección la historia con el diseño contemporáneo. Las gruesas paredes de mampostería originales, características del Viejo San Juan, encierran una propiedad de 1,600 pies cuadrados que la naturaleza y las personas sin hogar habían reclamado con el tiempo.

Rindiendo homenaje al pasado del sitio e incorporando funcionalidad moderna, el diseño restaura cuidadosamente las paredes de mampostería originales e integra una nueva estructura de concreto reforzado expuesto. Un jardín estrecho corre a lo largo, enmarcando la pared histórica como una pantalla visual para la casa y creando un contraste llamativo entre lo antiguo y lo nuevo. La vegetación circundante se extiende hacia arriba, culminando en una piscina en la azotea y una terraza que lleva el paisaje al espacio habitable.

La residencia cuenta con una sala de estar y cocina de concepto abierto, dos dormitorios, baños, una piscina y una terraza. Una brecha discreta entre el nivel superior y la azotea oculta los servicios mecánicos y eléctricos, preservando la estética limpia y minimalista del hogar. El primer piso fluye sin interrupciones hacia el jardín, mientras que los dormitorios del nivel superior presentan aberturas más pequeñas, evocando el carácter de la arquitectura circundante.
Diseñada en colaboración con el arquitecto Sotirios Kotoulas, la casa refleja el amor de Bernhardt por Puerto Rico: sus colores vibrantes, palmas, ritmos de reguetón e incluso favoritos locales como mayoketchup y tostones. Más que una residencia, este proyecto revitaliza una esquina olvidada del Viejo San Juan, transformándola en un centro cultural dentro de la próspera comunidad artística de la ciudad.